Reciclaje y metales, por mucho tiempo se tuvo la idea de que estas dos ideas no podían ir de la mano, que el metal era de eso materiales que no se podían reciclar y que solo se iban acumulando y acumulando.
Lo cierto es que, y aunque suene increíble, el acero es uno de los materiales de construcción más eco-amigables que existen hasta el momento; en promedio el 60% del acero producido en los Estados Unidos proviene de acero reciclado.
Latas, electrodomésticos, automóviles, estructuras metálicas… producto que se construya con acero y otros metales, se han fabricado con materias recicladas, y esos productos, cuando acaben su vida útil, también están destinados a ser reciclados.
El reciclaje del acero
Una de las principales ventajas del acero es su durabilidad, es un material que puede durar por mucho tiempo, esta misma duración es la que permite ser reciclado muchísimas veces sin perder sus propiedades.
El poder reciclar acero genera, obviamente, un impacto medio-ambiental positivo: primero, reduce la contaminación del agua y del aire en un 70%, segundo, reduce el impacto sobre los materiales renovables, finalmente, representa un ahorro económico, ya que es más barato realizar un buen proceso de reciclaje que extraer la materia prima.
Pongamos un ejemplo, en promedio construir un automóvil requiere de 800kg de metales férreos y 180kg aproximadamente de metales no férreos. Al día de hoy ya se hubieran agotado todos los recursos si no se reciclará el acero y los otros materiales.
Sin duda alguna el reciclar acero genera un impacto económico y ecológico, es más, el acero se ha convertido en el material más reciclado, superando a otros como el plástico, el papel, el aluminio y el vidrio.
Ventajas del reciclaje del acero
Como mencionamos anteriormente, genera un impacto positivo en el medio ambiente, ya que disminuye la contaminación del agua y el aire un 70%, además, los procesos de reciclaje consumen mucha menos energía: reciclar una lata ahorra la suficiente energía como para mantener un televisor encendido pro 3 horas.
Otro beneficio es poder reciclar el metal varias veces. Al ser un material que se degrada poco, tanto con el tiempo como por el reciclaje, puede someterse constantemente a proceso de reciclaje y no perder ninguna de sus propiedades.
Al ser un material reciclable, alarga la vida útil de los productos elaborados con él. Muchos productos de uso humano están fabricados con acero y otros metales: automóviles, lavadoras, microondas, latas, bicicletas, edificios, cucharas, tenedores… todos ellos son fabricados y pueden convertirse en metales reciclables.
Finalmente representa una enorme reducción de costo, tanto en su proceso de reciclado, como en procesos de producción y fabricación de productos como las estructuras metálicas.
Desventajas del reciclaje del acero
Quizás, el principal problema de reciclar acero y otros metales es que se requiere de una planta y de personal capacitado para realizar el procedimiento.
A diferencia del papel, el acero no puede ser reciclado en casa. Se debe recoger todo el material y llevarlo a plantas de reciclado, donde serán separados y preparados para el proceso de reciclaje.
Si bien es un material que se puede reciclar muchas veces, debe realizarse mediante los procedimientos correctos para no afectar su rendimiento. Se debe tener muy presente la efectividad, tanto el proceso de recolección y separación, como el proceso de recuperación de los usos previos del material.
Cómo es el proceso de reciclaje del acero
El proceso comienza con la recolección y la clasificación de los diferentes metales, ya que cada uno se trata de diferente forma.
El acero y el aluminio se pasan por un proceso de compresión para luego ser sometidas a una trituradora y obtener pequeños pedazos.
Estos pedazos pasan por un imán para separar el acero del aluminio. Finalmente se funden en lingotes para luego volver a ser fundido y aplanados y generar laminas, las cuales serán empleadas para producir estructuras metálicas u otros productos.
A manera de resumen, el acero es uno de los metales más eco-amigables que pueden haber, el poder reciclarlo ha generado grandes impactos positivos en el medio ambiente, pero también han generado un impacto económico, al reducir costos de extracción y producción.
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